sábado, 9 de febrero de 2008

Lo quiero para ayer!

Esta semana de pseudo vacaciones y de descanso intermitente, descubrí que tan diferentes pueden ser los tiempos de las personas, y que es inútil que intente poner a disposición de los demás mi pequeño relojito biológico.

Este último mencionado, pobrecito de él, ya se dio cuenta que mi tiempo y forma de pasar por momentos o etapas es muy difernte al de los demás, pero en las pequeñeces de la vida me resulta imposible aceptar "así nomás" que los demás quieran algo ya, especialmente cuando eso que queiren requieren que yo me ponga en movimiento.

Como para muestra sirve un botón ahí les va un ejemplo. Dejé plata de mi padre arriba del freezer, puse el billetito perfectamente tranquilo, aprisionado con un elemento pesado para que no se volara, a la espera que quien era el destinario sepa que ese dinero había llegado para él. Pero olvidé un detalle, mi abuela que andaba rondando por la casa me repitió una 168 veces que guardara esa plata, que ahí se iba a volar, que no podía ser tan desordenada, que la guardara (duplica) y varias repeticiones consecutivas de la misma frase, especialmente en momentos en los que es evidente que no lo voy a hacer, como siesta, ducha, limpieza de dientes, a punto de ir a dormir, etc, etc, etc.

Ahora yo me pregunto: Por qué la gente no puede entender cuando uno da una respuesta contundente, que aunque no nos guste es la pura verdad, y el tema debería haberse acabado hace 2 días?

Y si, porque si ya te dí una respuesta de por qué no cambio el dinero de lugar es porque el dinero tiene que estar ahí. Y así con otros muchos temas cosas que no se tienen porque resolver inmediatamente y sin embargo la gente quiere la inmediatez de acciones que no merecen tal privilegio.

4 comentarios:

Lic. Ruqui dijo...

Resistencia pura: todavía no guardé el billete, van dos días, y las repeticiones de mi abuela ascendieron a 264!

Mar dijo...

el problema es q el ser humano (la gran mayoria, yo a esta altura lo entendi e intento no molestar a la gente c esas cosas) quiere constantemente q los demas se comporten de acuerdo a sus habitos, sin darse cuenta q el d los demas no es malo por ser distinto!!
igual entende a tu abuela es d otra generacion (la de los hinchas)!!! jajaja

Lic. Laura A. Gonza - Lic. Carolina Basualdo Bodart dijo...

Romi ya hemos hablado de esto en nuestro encuentro chueril, es verdad, la gente quiere que todo se haga tal cual uno lo haria y la flexibilidad para aceptar las diferencias de los otros es inversamente proporcional al paso de los años.

Manahi dijo...

cuantas generaciones hay entonces?
*la de los hinchas
*la de los que no leen
y cuantas mas?
karinaaaaaaaaaaaaaa!!!!