martes, 31 de marzo de 2009

Más allá del horizonte...un poroto

Sigo viniendo al mismo bar de siempre, por razones que ahora no vienen al caso, y es increíble la facilidad que tengo para armar novelas con el resto de los comensales. Empiezo a pensar que ese que entró y se sentó solo en una mesa seguro que se pelió con la novia porque mira el celular 20 veces, o las dos chicas de la mesa de enfrente se podrían enganchar con los dos tipos de allá, o quién sabe cuantas cosas más que se me cruzan por la cabeza.
Es más, invento diálogos, que obviamente no existen, como si esos dos chicos de los que le hablaba comentan que en realidad esas chicas les gustan pero no saben cómo encararlas o que al chico que está solo cuando le suena el celular y habla con su chica, pero todo inventadísimo, porque los pibes seguramente estén hablando de fútbol y al pibe lo llaman de la oficina para preguntarle dónde puso la carpeta verde que no la encuentran por ningún lado. Ponele.
Hago esto de armar mini especies de novelas en todos lados, en el colectivo, en la facultad, en la calle, en una heladería, siempre, y si estoy escuchando música peor, te armo unos cortos musicalizados que te moris.
Directora en potencia de mini novelas, el formato que se viene para el 2050!

Ufff

Sigo insistiendo que es un laburo imposible pensar todos los santos días que comer! Por favor, además de que estoy hecha una gordita empedernida, es muy difícil pensar todo el tiempo que cocinar y lograr que sea lo suficientemente variado y nutritivo y rico, este último no siempre logrado.

sábado, 28 de marzo de 2009

Extrañamiento material

Extraño mis telas, mis mostacillas, mi máquina de coser, mis botones, mis hilos, mis acrílicos, eso extraño.

Sabés qué estaba pensando hoy...

Entre las experiencias que estoy viviendo acá y las cosas que pienso, veo y siento es que me pongo a escribir, en realidad sin mucho más para decir que el abrirme a nuevos lugares y nuevas situaciones me ubica en un lugar diferente, siento que esas cosas van a cambiar algo escencial en mi, que quizás no modifique mi caracter, mi humor, mi forma de ser frente a los demás, es más, quizás no sea algo trascendental para nadie más que para mi, pero me empiezo a ver, desde algunos puntos de vista, un poco diferente, enfrentándome a mi misma, ya no hablo de fracasos, circunstancias o tristezas, hablo de mi así como soy todos los días, sin más que vivir todos y cada día como una realidad propia y auténticamente mía.
Sé que seguramente no pueda escribir un libro interesante sobre mis peripecias actuales, es más, puede que hasta este blog no cuente nada demasiado interesante para los pocos lectores que le dediquen un rato, pero no sé como explicar que todo eso no me interesa comparado con la necesidad que tengo de vivir cosas irrelevantes o profundas que sólo me alimenten a mi, que me enfrenten a problemas o aciertos que yo misma pueda sortear o disfrutar, y que después de todo eso aprenda aunque más no sea que todo lo que quiera lo puedo hacer. Nada más ni nada menos.
Ustedes dirán de dónde sale todo esto o por qué Ruqui se puso tan introspectiva. En parte sale del clima barilochense (llueve y hace frío), otro poco sale de que es sábado (declarado como mi día de extrañar), además vi una película interesante (Into the wild) y además las cosas me están costando un poco y además porque tengo ganas.

"I read somewhere how important it is in life not necessary to be strong but to feel strong"

jueves, 26 de marzo de 2009

Mi primer enemigo Barilochense

Era cuestión de tiempo que me peleara con algún miembro de la comunidad barilochense. A pesar de mi pacifismo hay cierto tipo de gente que me saca de las casillas, en particular los que se meten con los animales.
Bueno, este es el caso, resulta que yo estaba pasando un lindo rato en el Centro Cívico, me había comprado un librito super barato, me senté en el mejor lugar, me puse mi Ipod y luego de unos 20 minutos de lectura escucho de fondo una moto que va y viene, va y viene, por supuesto alborotando a los perritos que viven en la plaza, a los cuales le smolesta mucho el ruido de las motos.
Me saco uno de los auriculares, miro para atrás, ya que de allí venía el ruido, y "oh sorpresa" me encuentro a un salame, muuuuy salame, que como le molesta que los perros lo persigan cuando pasa con la moto no tuvo mejor idea que pasar una y otra vez con su moto Harley "madura boludo y comprate un auto" Davidson.
Claro, no sólo los perritos le ladraban como locos, la gente empezó a mirarlo con un odio descontrolado y algunos le hicieron llegar sus insultos y demás demostraciones de "afecto".
Traté de seguir leyendo pero el muy gil, seguía pasando y pasando, asíqeu en cuanto lo tuve un poco más cerca, me paré, guardé el ipod, y con mi tranquilidad característica me acerqué a decirle lo siguiente:
Yo: Eeeehhhh, flaco, estoy tratando de leer hace media hora y ya pasaste 15 veces con la motito, te vas a dejar de joder?
El boludo de la moto: No piba, porque yo pago los impuestos y estos perros no me dejan pasar, asíque pienso seguir.
Yo: Es que el tema es que si seguis pasando una y otra vez es muy probable que los perros sigan ladrando, porque aunque no lo creas lo que les molesta es el ruido que haces. No sólo a los perros, a mi y a todos hace rato largo que nos rompés las bolas! (admito que acá subí el tono)
El boludo de la moto: No me importa, piba.
Ahí otros se sumaron a la cruzada "muerte psicológica al boludo de la moto" y le dijeron otras cosas, a lo que el Boludo de la moto no tuvo mejor idea que volver a prender la moto y tocar la bocina al grito de "no los escucho, no me importa, mira como los jodo" (juro que es textual).
Todos lo mirabamos con lastima hasta que el Boludo de la moto apagó el motor y aproveché para mandar el corolario de la charla y le dije "madura querido, sos un boludo importante".
No me escuchó porque seguía tocando bocina, pero me saqué el gusto de expresarlo. Ante el repudio de toda la población de la plaza, el Boludo de la moto se fue haciendo "willy!!", o como se escriba, y todos lo miramos con más pena que antes.
Obviamente los perros lo seguían corriendo y ladrando, pero como no son tan giles como él, apenas se les acercaba los perritos salían rajando, casi logrando que el Boludo de la moto se pegue flor de golpe.
En fin, vieron, hay giles en todos lados!
Agradecimientos especiales: al pibe de los malabares que quería usar uno de los antes nombrados como garrote sobre la cabeza del Boludo de la moto, a la hippie que lo encaró, a la señora rubia y su ñieta y a los dos gallegos que se le reían en la cara al Boludo de la moto. Y por supuesto a los perritos plazeros.

Super ecológica


El domingo me fuí a pasar la tarde a una playa del km. 8 y para mi sorpresa cuando llegamos había vecinos de Bariloche que los fines de semana se ocupan de limpiar las playas y de contarle a los turistas que es lo qué hacen. Muy buena idea!

lunes, 23 de marzo de 2009

Conclusiones sureñas

En una extensa charla, de esas que salen en una caminata bordeando el Nahuel Huapí, comenzé a pensar en que tipo de persona soy, si estoy en el grupo de los optimistas o pesimistas, y así llegué a la conclusión de que trato de no mostrarme optimista para evitar el golpe.
Una especie de optimista encubierta, como que no se le anima a ser optimista a raja tabla sólo por el hecho de bancarse la mala sangre de decir "uh, no al final salió mal".
Así es como llegué a la conclusión que dentro de mí hay una optimista empedernida, que quiere darle rienda suelta a pensar, como a veces pienso, que por más que todo se venga abajo siempre se puede hacer algo más para salvarlo, que las cosas pueden salir bien y que, como escuché en un bar el otro día mientras pensaba, a veces lo imposible tarda un poco más.

viernes, 20 de marzo de 2009

Están abrazando a la tele? Nooooooooo

A pesar de mis creencias ay mi estilo de vida previo a mi viaje, pensé que la televisión era una compañía, una caja de diversión y una especie de ventana para llenar algunos de los momentos libres de la vida.
Cuando decidí venirme a Bariloche, A lo primero que me avisó es lo siguiente "mira que no hay tele acá", debo admitir que en un primer momento me corrió una especie de frío por la espalda de sólo pensarlo. Por lo que antes de mi partida intenté, sin éxito claro, dejar progresivamente la televisión, especialmente cuando sólo la prendida por costumbre.
Como no logré tal objetivo me dije a mi misma que lo mejor era dejarlo a la suerte y ver que ocurría cuando llegaba.
Y debo decir que no extraño mucho la tele, será quizás porque al tener la computadora puedo ver películas o series que ni siquiera en Buenos Aires veía porque no tenía cable. Bueno pero el resto de lo que veía no lo extraño porque siempre caían en el zapping notícias que no me interesaban, programas aburridos o noticieros plagados de malas nuevas.
En fin, televisión dejame que te diga que no te extraño tanto y que la vida sigue su rumbo!

miércoles, 18 de marzo de 2009

La prueba de la limpieza

Una de las pocas cosas materiales que extraño desde que estoy aquí es el querido lavarropas, por favor, como quisiera tener uno, miniatura aunque más no sea, con que le entre una remera ya estoy conforme.
Ante la ausencia de ese tan amado aparatito, no sabía de este amor hasta hoy, me dispongo a lavar unas remeras que ante la alta temperatura usé cotidianamente, por lo que con mi jabón blanco en una mano y la canilla del lavatorio del baño a todo lo que dá empecé la loca tarea de lavar. IM PO SI BLE, por lo menos es dejar la ropa lo suficientemente limpia como solía quedar antes. Meta fregar y fregar para no mucho, igual no me dejé vencer e hice todo lo que estaba a mi alcance.
Luego llegó el momento del enjuague, para qué? no podía poner la remera abajo del agua para lograr que por lo menos se enjuague dignamente, así fue que de a poquito logré ir enjuagando la remera mojando pequeños sectores de tela plagados de espuma.
Cuando creí que la odisea había terminado me dí cuenta que todavía me quedaba pensar como iba a hacer para colgarla y que se secara dentro de los próximos 5 días. Así es que vi dos clavitos en el baño y ahí fue a donde fue a parar mi remera.
Por suerte, la mente brillante de A la sacó de ahí y la puso en una silla para que se seque más rápido porque sino todavía está goteando en el baño.
Es difícil ser ama de casa. Lavarropas volvé, te perdonamos.

lunes, 16 de marzo de 2009

Fríos son los de ahora

Y se vino el frío a Bariloche, es en momentos como este que si uno se pone a observar a los que pasan por la calle, se da cuenta en menos de un instante quién es de acá y quién no. Los barilochenses parece que no se dieran cuenta que el termómetro está marcando 20 grados menos que la semana pasada y siguen luciendo sus lindas remeritas, sus bermudas, ojotas y, a lo sumo, algún que otro sweter de hilo.
Después venimos los turistas y yo que nos encontramos con lo que en Buenos Aires llamaríamos "una verdadera ola polar" y algún que otro brasilero que se quedo petrificado en la esquina de la casa de camperas de cuero, porque no hizo a tiempo a ponersela.
Así es que se dan las charlas entre grupos de turistas que esperan el colectivo para ir a boludear por ahí y no se cansan de repetir "ehh Tito, frío no? esto en Villa Tesei no pasa, mier#/! que hace frío!", o dos señoras cuchichean "ahora mirá a estos, no tienen nada de abrigo, que locura".
Mientras que en la fila hay otros que van a laburar y no tienen más que una remera y un saquito, entonces miran a los turistas con cara de pocos amigos y porque no dejan escurrir entre los dientes un "manga de boludos".
Entonces es que dejo de lado la mirada porteña y me rindo a pensar que el frío que me espera es aún peor, debí saberlo cuando fuí a la entrevista en el aeropuerto y me avisaron que, en el caso de obtener el empleo, me pagan un plus por "zona fría", osea y traducido al idioma Ruqui "nena, ni Papá Noel se lo banca".
Igualmente nada, ni este frío de marzo, ni el que vendrá en abril, ni la zona fría y mucho menos el brasilero petrificado por la pseudo ola polar me harán declinar, aquí sigo, para informar, desde el lugar de los hechos. Seguime chango.

viernes, 13 de marzo de 2009

Empacada

Gran parte de mi venida a bariloche depende de que encuentre un trabajo, que por ahora, a pesar de mis intentos, se está haciendo rogar. Pero más allá del hecho del empleo en sí, me dí cuenta que lo que me pasa es que me empaco, quiero algo y lo quiero ya, y no puedo soportar que las cosas no salgan de una, y cuanto más me cuesta, más me empaco y bue, así se hace una bola de empaque que en definitiva me termina tirando abajo o por lo menos impidiendo que vea lo lindo que es todo esto y lo bien que me siento de estar acá.
Asíque, además de bajar los niveles de acelere, tengo otra tarea, empezar a dejar que pase lo que tenga que pasar. Tarea para el hogar!

Ruqui en un bar

Son las 19:30, me siento en un bar, saco mi computadora, me pongo a escribir, y mientras espero mi café con leche, pienso en que nadie me conoce, que no es como en Buenos Aires donde siempre nos juntamos en el mismo bar, pedimos lo mismo, el mozo/a ya nos mira como diciendo "chicas, otra vez lo mismo", y todas ya sabemos que eso es parte de la salida. Además de saber que uno va a determinado lugar y se encuentra a gente conocida y siempre reparte "holas", saludos y besos.
Pero bueno, ahora estoy en otro lugar, con otras personas, y eso es muy loco, porque es raro que a uno no lo conozcan, especialmente cuando vivió siempre viendo a las mismas personas y jugandola de local.
Eso es lo que quería contarles, esas son las cosas que pienso, de las que me sorprendo ahora que tengo tiempo para caminar sola, pensar y entender que mi hoy es distinto, pero que está bien que sea así.

Primeras impresiones

Estando aquí en Bariloche, me llama la atención la belleza que rodea esta ciudad, no puede ser normal que las ventanas de las casas, las vidrieras de los negocios, la puerta del banco, todo, dé a las montañas, el lago, algún que otro cerro o a los cielos más azules liberados de contaminación visual.Me dí cuenta de esto por situaciones particulares que viví estos días, a saber: iba caminando por una avenida, una especie de costanera, y veo que hay una clínica cuyas ventanas dan al lago y decía para mis adentros "que loco, porque en Ciudadela las ventanas de la clínica dan a la antena inmensa de los Bomberos Voluntarios, o con suerte a los edifícios de la vereda de en frente.En otra oportunidad iba en el colectivo y unos chicos que eran de Bariloche se sentaron delante de mí y empezaron a comentar que cuando se encontraban con otro amigo se iban a la playa a pasar la tarde, todo esto un jueves común y corriente de época escolar, laboral. Esto es incomparable a nuestras tardes en la época escolar. Así como también son incomparables esos mismos viajes en colectivo, porque sea que sea para donde mires hay montaña, laguito, cosas dignas de ser miradas.En fin, voy de a poco entendiendo como funciona esta ciudad, además de ya saberme todas las calles porque no paro de caminar, y voy entendiendo como se puede vivir lejos de Buenos Aires.
Abrazos con mucho viento y fresquito, Ruqui.

martes, 10 de marzo de 2009

Mi primer tarde Barilochense

Dos amigos nuevos!




Tarde playera

Ruqui News

Querían notícias?
Bueno, aquí están. Sigo en mi búsqueda laboral, si me pagaran por caminar me estaría comprando el Llao Llao. Camino por aquí, camino por allá, y en cuanto estoy por caer en la locura de ya no saber donde estoy, miro el lago, las montañas y entiendo todo, sé por qué estoy acá.
El clima, un capítulo aparte, el calor que hace no se registra hace mucho, 30 toda la tarde, inpresionante, y un sol muy fuerte, mi teoría es que quema más porque estamos más cerca del sol que en Buenos Aires.
Los grandes momentos de mis primeras horas aquí son: los atardeceres leyendo en el lago, las meriendas, las caminatas del anochecer volviendo del super y llegar a lo de Anita, dejando atrás las dos calles en subida.
Lo peor: las ampollas que me salieron en los pies por caminar en chatitas 3.258 cuadras cuesta arriba.
En mi primer día aquí, ya eran como las 12:30 y sólo me quedaba un lugar por visitar, le pregunto a un señor que pasaba por ahí dónde quedaba la calle y me indica donde es, no sin antes mencionar que "queda justo arriba de la que zigzaguea". No me gusto eso del zigzag, y no era para menos, porque en mi vida nunca, jamás de los jamáses vi una calle tan empinada y difícil de subir, como lo comprobé instantes después!
Pero bueno, cosas que pasan, el resto va como piña, aunque por momentos piense lo contrario, nada que una mirada panorámica y una respiración profunda no puedan solucionar.

viernes, 6 de marzo de 2009

Viste quién se fue a Bariloche?

A pesar de los rumores barriales que indicaban que mi partida estaba vinculada a un embarazo no deseado o a que le había robado a mis padres las escrituras de mi hogar, utilizo este blog para desmentir esos falsos dichos y aclarar que me voy porque se me canta (iba a poner que se me canta el culo, pero me pareció medio fuerte)
Así como lo leen me embarco en esta loca aventura y creo que todos los que leen este blog saben
significa un crecimiento para mi ya que no soy de los que todos calificaríamos como "uy, Ruqui es una loca de los riesgos", pero bueno esta vez las cosas son diferentes y parece que arriesgar no me preocupa tanto.
Será por eso que la culpa, el miedo y las enfermedades psico-somáticas no pueden hacerme dar un paso al costado en esta nueva carrera hacia el que sé yo.
No tengo grandes espectativas, no quiero hacerme rica, no quiero comprar medio Bariloche, ni poner una chocolatería, ni cazar al Nahuelito, sólo voy a vivir lo que sea que tenga que vivir en dicho lugar, con lo que pueda o con lo que sepa conseguir, igual si todo sale medio para atrás en temas laborales el próximo post tendrá como único contenido el número de una cuenta bancaria donde podrán depositar "a voluntad" montos de 4 cifras, si, nada de pichulearle a a la fundación "felices las Ruquis"
En fin, a todos les digo hasta el próximo post, que será redactado entre montañas y vientos huracanados(?) contando como es mi nueva vida a unos cuantos kilómetros.
A todos los que les debo algo, a la vuelta arreglamos, no me vengan romper ahora.
A todos lo que me quieren, les digo que pues yo los quiero el triple
A los que se quedaron con ganas de decirme algo, manden mail o llamen por tel, o msn, se acepta todo, declaraciones de amor, puteadas o sólo para charlar de la nada misma.
Y a todos los que forman parte de mi vida, quiero decirles que yo soy la persona que soy porque ustedes están en mi vida, y hacen que mi vida sea la envidia de cualquiera, así que yo me siento orgullosa de la gente que me rodea y la distancia sólo va a hacer que los quiera más. Ahhh, y si los busca la yuta, ya saben que tendrán donde cobijarse, en un lindo hostel lleno de israelies y franceses, porque no tengo casa propia, aún!
Bueno, nada más, los quiero y sigan las Ruquiaventuras ahora versión montañosa a través de este blog.
Por siempre de ustedes, Ruqui

lunes, 2 de marzo de 2009

Analizando el mes de Marzo

Flor de mes, el mes de marzo y pocas veces valorado, aunque, en lo que a mi respecta, es un mes que desde que mi vida es vida ha sido ese mes en el que todo arranca, y para no desentonar, este año el arranque se lo dí yo.
A saber, las clases siempre empezaron en marzo y significaron cambiar las mañanas veraniegas de dormir hasta tarde para entregarse a ese mundo loco de las mochilas, los guardapolvos y el Nopucid en cantidades astronómicas para evitar a los inevitables inquilinos conocidos como piojos.
Después llegó la secundaria, y si bien fuí tres años a la tarde, el mes de marzo significaba el comienzo de clases y de, algún que otro año, dar una materia que quedaba.
Los marzos que sucedieron a la secundaria significaron entrar a la universidad y empezar a codearse con el mundo de los "adultos". Después hubo marzos de peleas con novios, marzos de retomar terapias, marzos de dejar terapias, marzos de conocer amigos, en fin, marzos para tirar para arriba.
Y ahora, sin estudios en marzo, me encuentro con otro marzo más que importante, el mes en que me voy, asíque parece que mis terceros meses del año no son para dejarlos pasar así nomás, y vaya que son el comienzo de tantas cosas nuevas.