martes, 10 de marzo de 2009

Ruqui News

Querían notícias?
Bueno, aquí están. Sigo en mi búsqueda laboral, si me pagaran por caminar me estaría comprando el Llao Llao. Camino por aquí, camino por allá, y en cuanto estoy por caer en la locura de ya no saber donde estoy, miro el lago, las montañas y entiendo todo, sé por qué estoy acá.
El clima, un capítulo aparte, el calor que hace no se registra hace mucho, 30 toda la tarde, inpresionante, y un sol muy fuerte, mi teoría es que quema más porque estamos más cerca del sol que en Buenos Aires.
Los grandes momentos de mis primeras horas aquí son: los atardeceres leyendo en el lago, las meriendas, las caminatas del anochecer volviendo del super y llegar a lo de Anita, dejando atrás las dos calles en subida.
Lo peor: las ampollas que me salieron en los pies por caminar en chatitas 3.258 cuadras cuesta arriba.
En mi primer día aquí, ya eran como las 12:30 y sólo me quedaba un lugar por visitar, le pregunto a un señor que pasaba por ahí dónde quedaba la calle y me indica donde es, no sin antes mencionar que "queda justo arriba de la que zigzaguea". No me gusto eso del zigzag, y no era para menos, porque en mi vida nunca, jamás de los jamáses vi una calle tan empinada y difícil de subir, como lo comprobé instantes después!
Pero bueno, cosas que pasan, el resto va como piña, aunque por momentos piense lo contrario, nada que una mirada panorámica y una respiración profunda no puedan solucionar.

1 comentario:

Mar dijo...

Mire y respire, eso alivia todos los males!!!