Reloj deten tu camino

El tiempo, que tema! Tantas maneras de medirlo, horas, minutos, segundos, milésimas. Toda una infraestructura dispuesta para que logremos organizar, medir, delimitar los momentos. Ahora la pregunta es: ¿Alcanzan los minutos, las horas, para medir lo que nos pasa?
Cuántos instantes diminutos, pequeñisimos sirvieron para que la vida de alguien cambie para siempre? ¿y cuántas cosas tuvieron toda una vida para pasar y no ocurrieron?
Entonces es ahí cuando empezamos a pensar en no perder el tiempo, en vivir como si fuera el último día, en no desaprovechar oportunidades, en tantas cosas que terminamos abarcando todo pero quitandolé a todo el lugar en el tiempo que merece.
Si hay algo que demuestra que el hombre (humano) es un gil es que está todo el tiempo tratando de ganarle al tiempo, con cremas, pastillas, operaciones, y de lo que no se da cuenta es que desde el momento que empezó a competir ya perdió, porque hubo cosas en el camino que no aprovechó por estar mirando hacia lo que pasaba más adelante.
Eso me pasa mucho, estar pensando en que va a pasar mañana y perderme tantas cosas de hoy. Mucha gente, más de la que pensamos,trabaja horas y horas para tener plata mañana, sin saber si mañana va a estar, perdiendosé los ratos que valen la pena. Juntan responsabilidades irrelevantes para que el día de mañana tengan un super curriculum y no disfrutar el momento de aprender, pensar, crecer. Estudian más y más, para llegar a la nota soñada y terminar una carrera ejemplar pero no pueden acordarse de ningún nombre de compañeros, ni de ratos de café tratando de arreglar el mundo o riendosé.
Tantas cosas tan chiquitas pueden pasar en el ahora, en un segundo, cruzar una mirada, respirar profundo y sentirse tranquilo, mirar a los amigos, la familia, los amores, mirarse uno y sonreir, estar tranquilo/a, saber que se está en el lugar donde se tiene que estar, en el momento indicado, por más que no tenga nada de espectacular, pero que es de uno y de los que lo gusten compartir.