lunes, 14 de diciembre de 2009

0% de resistencia

Por alguna razón ocurría hasta hace unos años que no me gustaba la cerveza, ni el Fernet y el sábado reconfirmé la respuesta: no tengo tolerancia al alcohol.
Salimos a cenar y mientras esperábamos al resto del grupo (6 personas) empezamos con una cerveza, después llegó el resto y pedimos la comida acompañada por otra cerveza. Luego vino otra cerveza y por último el postre/trago (baileys con helado).
No hace falta que les cuente que a la mitad de la cena yo estaba un poco mareada y tras pensar y pensar me dije que tenía que ir al baño. Afortunadamente para mí, y para los demás, en el baño estaba sola por lo que hice lo que tenía que hacer y luego pasé cerca de 5 minutos con la cabeza apoyada en el marco de la puerta para ver si se me iba el mareo. Por un momento creí que no se me iba a ir nunca y empecé a pensar que iba a pasar la noche en ese baño. Las ideas que se me pasaron por la cabeza fueron varias entre las que se destacó "uh, que boluda me olvidé el celular, no les voy a poder avisar a mis amigas que me vengan a buscar. Y si me desmayo? Igual si tardo van a venir a verme".
Todo eso mientras es marco se enterraba en mi frente. Se fue un poco el mareo y volví a la mesa, mucho mejor. Luego la cena siguió bien, entendí todo lo que pasaba pero el tema fue cuando salí a la calle y me agarró el fresco de la noche. Para qué? Mientras esperaba el remis en lo de C parecía una foca tirada en el sillón. Por suerte se pasó rápido y llegué a mi hogar sana y salva para dormir y pensar que gracias a Dios de adolescente no viví esta escena lamentable.

7 comentarios:

Mar dijo...

Podrias mencionar que C, que es un amor, te prendio el ventilador, te hizo sacar la campera (para que el impacto con el frescor no sea tan fuerte cuando salieras) y te dio charla para que se te pasara el mareo, mierda! eh?! jajajjaa

manu dijo...

Resulto bastante flojita lic.!!!

marita dijo...

odio que te hayas convertido en una borracha cualquiera, por cierto C es más que un amor, yo te hubiera dejado tirada en la calle vomitada.... sabés que te cae mal y dale que te dale!
Igual te quiero, obvio

Manahi dijo...

Yo voto por una ruqui más borracha y menos responsable! Está bueno tomar de vez en cuando...siempre que puedas controlar el desenlace, que es lo que le falta a la licenciada. Pero todo es cuestión de práctica, gato borracho! (perdón, creo que marce se apoderó de mi por un momento!)

Lic. Ruqui dijo...

jajajajaj!
Cani: Si, un primor, me ayudó en los peores momentos.
Manu: Si, floja floja.
Marita: No soy borracha, vos tomás demasiado poco, osea nada. Yo también te quiero!
Manahí: jajajaja, yo sacaría el "una ruqui más borracha" por un "una ruqui más festiva".

Taller Literario "El Plumero" dijo...

No entendi bien...despues de lo del baño seguiste con el baileys con helado??? Porque para no sentirte tan mal la proxima te aconsejo...cuando te marees no tomes mas!!! Te lo digo por experiencia de amiga de mujeres borrachas que lanzan en locales bailables jajajaj!

annie dijo...

Ruqui te re entiendo, el sábado en mis festejos me excedí y terminé en el baño pidiendo que el mundo deje de girar... no fue tan poco como una birra pero fue poco para quebrar tanto me parece...
somos blanditas, y qué?
la clave es conocer los límites de cada uno, y bueno: algunos son medio bajos...