viernes, 29 de julio de 2011

Me fui para volver




Me fui unos días de viaje. Bariloche me esperaba con su frío, sus montañas, su lago, su ceniza y sus ambientes hiper calefaccionados (mal para la naturaleza, chicos!).
Es notable como los viajes le permiten a uno pensar de un modo que en la vida nos parece imposible, despreocupada de horarios, apuros y responsabilidades. Uno cree que todo está bien y quiere quedarse en ese estado siempre.
La comida te engorda y no te importa, el frío te congela y no molesta, el colectivo no pasa y seguís esperando sin putear. Todo parece lindo, hasta lo feo.
Por eso les muestro un poco de lo que ví para que ustedes viajen un poco también.

4 comentarios:

manu dijo...

Gracias ruqui por compartir fotos tan lindas!!!
Y es verdad uno en vacaciones se predispone de otra manera solo a disfrutar sin preocupacion alguna, lastima que son tan cortas y tenes que volver a la realidad, pero bue bienvenida!!!

Mar dijo...

Ay si! No puedo creer lo buena y poco malhumorada que soy en realidad! Lo que mata es el stress y la gente de mierda! La pasamos de re chupete! :P

Taller Literario "El Plumero" dijo...

Bueno por ahí uno puede volver, de otra manera a la que se fue antes de haber partido...por ahí alguna vez se pueda conservar alguito de ese estar vacacioneril...expresion de deseo???

Manahi dijo...

Se puede empezar por mudarse a un lugar en el que la gente vacaciona, no?