martes, 9 de septiembre de 2008

Ya saqué mi conclusión

Luego de que las tribus urbanas adolescentes se cagaran a trompadas en el Abasto, me puse a pensar en este fenómeno de los grupitos que andan por la vida lookeados y aislando a todos de su micro mundo.
Hasta hace algunos días yo no entendía bien esto de los floggers, los emos, los raperos, los que sé yo y que sé cuanto, pero analizando un poco llegué a la conclusión de que los adolescentes el único momento de la vida que tienen para hacer esto es este, el momento de experimentar, agruparse, disgregarse, tratar de encontrar en los pares el lugar para charlar de lo que obviamente no hablan con los grandes porque seguro lo que opinan es que hablan todo el día de pelotudeces.
Asíque para mi está perfecto que los pibes se identifiquen con un grupo. Pero las macanas de esta situación es que se discriminen entre grupos, ya que es obvio que eso lo copian de los más grandes, por lo que en vez de pensar como hablan o se visten, mataría que pensemos por qué se pelean o son jodidos con los que no se parecen a ellos. Además, otra macana, es que las empresas se hacen un banquete con los pibes que compran cuanta pelotudes les dicen que los identifica con un grupo y eso, de ser de un grupo y no del otro, termina siendo más una cuestión de moda que de ideología.

1 comentario:

marita dijo...

la gente está educada para discriminar en vez de respetar, para prejuzgar, para hacer sentir mal al que es distinto... así es la vida y no va a cambiar, más allá de lo que uno pueda desear, estamos en el horno.